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miércoles, 19 de agosto de 2009

Finalmente, la Cámara Administrativa expresó su deseo de que los legisladores garanticen los derechos y aspiraciones de los partidos que obtuvieron menos votación en la contienda electoral anterior.
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Cámara Administrativa de la Junta Central Electoral (JCE) exhortó a los congresistas a aprobar el Proyecto de Ley de Partidos y Agrupaciones Políticas, ya que el mismo crearía instrumentos que permitirían para fiscalizar y supervisar el accionar de los partidos con mayor eficiencia que en la actualidad.
Asimismo el organismo electoral entiende que está ley constituiría en una norma regulatoria que llenaría un vacío existente en materia de las organizaciones políticas en el país.
Indicó, que la aprobación de esta ley contribuiría a adecentar el ejercicio de la política en República Dominicana y a fortalecer el sistema de partidos y la democracia nacional.
Coincidió con el Presidente de la JCE, Julio César Castaños Guzmán, en el sentido de que si no se aprueba a tiempo esta ley sería imposible su aplicación de cara a las elecciones congresuales y municipales del año 2010, por lo que urgió de los legisladores aprobar este proyecto de ley, que tiene más de diez años en el Congreso Nacional.
Los aspectos que poseen un mayor impacto en la actividad política contenidos en el proyecto de ley son los siguientes:
- Transparenta los procesos internos de los partidos en cuanto a la escogencia de los candidatos a puestos electivos, garantizando que los resultados que emanen del proceso de primarias organizadas, administradas y supervisadas por la JCE serán más creíbles y aceptados por todos los precandidatos participantes.
- Uno de los principales problemas que los partidos enfrentan es que muchas veces no logaran conformar una comisión organizadora de las primarias bien equilibradas (en el sentido de la representación de las distintas corrientes internas) y esta situación genera desconfianza y situaciones de crisis que ponen en peligro la propia realización del evento eleccionario interno. Asumiendo la JCE la organización y supervisión de las primarias internas de los partidos, los partidos ya no tendrán esta dificultad de que no cuentan con los suficientes recursos humanos para conformar las distintas comisiones que tienen que administrar imparcialmente el proceso interno.
- Los recursos económicos requeridos para la celebración de las primarias resultarán menos, ya que con una sola inversión se hacen trabajan todos los partidos participantes, obviamente que resulta menos que si cada partido organizara su propia actividad. Además de que la JCE podrá utilizar materiales sobrantes de los procesos electorales anteriores lo que se traduce en una reducción significativa de la inversión que habría que realizar.
- Las normas y disposiciones reglamentarias que se dicten alcanzarán de igual manera a todos los participantes, partidos y precandidatos, lo que garantiza una mayor equidad del proceso de selección.
- Los partidos dispondrán de mayor tiempo para preparar su campaña interna ya que no tendrían que emplear tiempo para organizar las primarias.
- Uno de los aspectos más fundamentales es que los partidos se compactarían más, y habrían menos fricciones y rupturas internas, ya que como el partido no es árbitro de su propio proceso interno no se generarían quejas ni reclamos de parte de los precandidatos aspirantes a posiciones electivas. Contrario a lo que sucede en la actualidad que los procesos internos siempre generan disgustos y reclamos a las autoridades responsables de organizar y montar los procesos internos de los partidos.
- A los candidatos escogidos mediante primarias organizadas por la JCE, tendrán la garantía total de que sus derechos adquiridos serán respetados al momento de que el partido conformará las listas de candidatos para ser depositados ante la JCE y las Juntas Electorales.
- Se elimina la afiliación partidaria múltiple, lo que se traduce en una sincerización de la nómina de militantes de los partidos.
- Se establece la unicidad de criterios en torno a la regulación y funcionamiento de los partidos políticos. Esto contribuye a que los partidos se fortalezcan y puedan realmente constituirse en organizaciones verdaderamente representativas.
- Regula la afiliación de determinados funcionarios públicos, dejando claramente cuales funcionarios del Estado pueden mantener su militancia cuando asumen una función pública.
- Los recursos económicos del Estado que reciben los partidos, garantiza una inversión más efectiva y eficaz, ya que establece porcentajes para renglones básicos como son la capacitación y educación de su militancia, así como la inversión propiamente en las actividades de desarrollo del partido. En sentido general esto contribuye grandemente el fortalecimiento de las organizaciones partidarias.
- Establece una efectiva regulación de la precampaña y campaña electoral, lo que se traduce en una herramienta que garantiza el control por parte de la JCE y sanciona el inicio de la campaña a destiempo.
- Establece una norma más efectiva a cargo de la JCE de la supervisión y control de los recursos que el Estado proporciona a los partidos, lo que garantiza mayor transparencia en el uso de los mismos.
- El resultado de las primarias en esta nueva modalidad reflejará la votación real de la militancia y simpatizantes, ya que al ser un mismo día cada cual votará por el partido de su preferencia, evitando la injerencia en otro partido a través de su voto.
- Otro beneficio es que la ley establece formalmente el porcentaje de las cuotas que pueden reservarse los partidos para los fines de presentación de candidatos para las elecciones de que se trate.
Finalmente, la Cámara Administrativa expresó su deseo de que los legisladores garanticen los derechos y aspiraciones de los partidos que obtuvieron menos votación en la contienda electoral anterior.