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jueves, 28 de enero de 2010

.- El presidente de los EE.UU., Barack Obama (c), pronuncia el discurso sobre el Estado de la Unión junto al vice presidente, Joe Biden (i) y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (d), en una sesión conjunta en el Congreso hoy, miércoles 27 de enero de 2010, en el Capitolio en Washington (EE.UU.). Obama instó al Congreso a revivir la reforma sanitaria, pese a que los demócratas han perdido la mayoría absoluta en el Senado que garantizaba su aprobación.
Republicanos: EEUU ya no soporta el elevado gasto demócrata
Por KATHARINE Q. SEELYE
Con su agenda legislativa estancada y el desempleo por las nubes, el presidente Barack Obama usó su primer discurso del Estado de la Unión el miércoles por la noche para presentar sus planes para reconstruir una nación "puesta a prueba'' y crear más empleos.
En un discurso que se concentró abrumadoramente en enfrentar los males económicos del país, Obama sólo dedicó una pequeña parte de la alocución a la controversial reforma de los servicios médicos. En su lugar, presentó un panorama sombrío de los retos económicos y la necesidad de poner coto a los excesos de Wall Street y generar empleos.
"No podemos permitir que las instituciones financieras, entre ellas las que ustedes depositan su dinero, asuman riesgos que pueden amenazar toda la economía'', dijo el Presidente en un discurso al que incorporó el tono populista que ha adoptado desde la sorpresiva derrota de los demócratas en Massachusetts la semana pasada.
Sin embargo, defendió el rescate de los bancos afirmando que era necesario para salvar la economía, aunque afirmó que era una píldora dura de tragar.
"Si hay algo que ha unido a demócratas y republicanos es que todos odian el rescate bancario'', dijo. "Yo lo odié. Ustedes lo odiaron. Fue algo tan popular como sacarse una muela''.
Más adelante, tocó el tema de los servicios médicos, citando la necesidad de que el Congreso tome medidas, lo que provocó aplausos.
"Para cuando termine de hablar esta noche, más estadounidenses habrán perdido su seguro médico'', dijo. "Millones más lo perderán este año. El déficit aumentará. Las primas aumentarán. Los pacientes no podrán recibir el servicio que necesitan. Los pequeños negocios seguirán abandonando la cobertura''.
Pero, agregó: "No voy a abandonar a estas personas. Ni tampoco debe hacerlo nadie en esta cámara''.
El Presidente también toco temas de seguridad nacional y la amenaza de la proliferación nuclear. Dijo que desde que asumió el cargo "hemos renovado nuestro enfoque en los terroristas que amenazan la nación'' y mencionó las inversiones en la seguridad interior y la eliminación de planes para atacar objetivos estadounidenses. Mencionó brevemente a los soldados en Irak y Afganistán, diciendo: "Todos tenemos la responsabilidad de apoyarlos cuando regresen a casa''.
Pero el mayor énfasis, con mucho, fue la creación de empleos, la economía y la asistencia a la clase media.
Solicitó algunos créditos fiscales, subsidios para gastos como servicios de cuidados infantiles, préstamos a estudiantes y una congelación de tres años en los gastos discrecionales. También planea nombrar una comisión bipartidista para que emita recomendaciones para reducir la deuda a largo plazo del país.
Pero advirtió: "Tenemos que reconocer que enfrentamos más que un déficit de dólares. Enfrentamos un déficit de confianza, deudas profundas y corrosivas sobre cómo funciona Washington que han crecido durante años''.
Y agregó: "Para cerrar ese vacío de credibilidad tenemos que tomar medidas en ambos lados de Pennsylvania Avenue para poner fin a la influencia de los cabilderos, trabajar con transparencia y dar al pueblo el gobierno que se merece. Eso es lo que vine a hacer a Washington''.
Asistentes de Obama habían dejado entrever antes del discurso que el Presidente reconocería que cometió errores durante su primer año en el cargo y exhortaría a sus críticos republicanos a redirigir sus energías y cambiar el tono y la cultura de Washington. En el discurso, de hecho emitió un nuevo llamado a la cooperación bipartidista.