Los afectados eran sometidos por Mayra Jacqueline Peña Rosa alegadamente también a trabajos forzosos en un negocio de su propiedad bajo la promesa de que serían evangelizados.
La medida le fue impuesta por el Tribunal de Atención Permanente de la provincia Santo Domingo a solicitud de la Fiscalía de esa demarcación.
cumplirá la medida de coerción en el centro correccional Najayo, acusada de violentar las disposiciones contenidas en los Artículos 330, 331 y 333 del código penal dominicano, y Art. 396 de la Ley 136-03, en perjuicio de una menor de 17 años.
Una nota del Ministerio Público señala que inició la investigación del caso tras recibir la denuncia de los padres de una de las menores de edad que acogía Peña Rosa en su residencia, cuyo testimonio revela que la mujer la tocaba en sus partes íntimas, la obliga a la bañarla y a sostener relaciones sexuales con un hombre que vivía en el lugar, bajo la idea de que era una revelación divina y el método para la joven expiar sus pecados.
Otros jóvenes explican que eran sometidos a estrictas jornadas de trabajo en la vivienda y en un comercio de Peña, y que cuando se resistían, los hacia dormir en el patio o en el negocio, como castigo a la desobediencias de sus revelaciones.
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