HIGÜEY. EL obispo Nicanor Peña pidió un diálogo sincero y abierto para debatir los grandes problemas nacionales que afectan a los dominicanos.
Abogó por la construcción de una patria en la que los dominicanos no tengan miedo uno del otro.
El obispo se expresó en esos términos durante la homilía que pronunció en la Basílica con motivo del Día de la Altagracia, a la que asistieron el presidente Danilo Medina, funcionarios y miembros de la oposición política, encabezada por el candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno, Luis Abinader.
Además asistió el senador por la provincia La Altagracia, Amable Aristy Castro.
El obispo dijo que la Virgen de la Altagracia da la fuerza para continuar en el camino del bien, en el servicio al prójimo, cumpliendo con las obras de misericordia. “En sus manos fraternales colocamos a nuestro país, a todos los dominicanos, para que ella nos alcance la gracia de vivir con intensidad nuestra vida de fe sin temor, como ella lo hizo”, indicó.
Recordó que 2016 fue declarado por el papa Francisco como “El año de la Misericordia”, por lo que recomendó a los dominicanos hacer énfasis en cultivar la paz, para estar en consonancia con esa declaratoria.
HIGÜEY. EL obispo Nicanor Peña pidió un diálogo sincero y abierto para debatir los grandes problemas nacionales que afectan a los dominicanos.
Abogó por la construcción de una patria en la que los dominicanos no tengan miedo uno del otro.
El obispo se expresó en esos términos durante la homilía que pronunció en la Basílica con motivo del Día de la Altagracia, a la que asistieron el presidente Danilo Medina, funcionarios y miembros de la oposición política, encabezada por el candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno, Luis Abinader.
Además asistió el senador por la provincia La Altagracia, Amable Aristy Castro.
El obispo dijo que la Virgen de la Altagracia da la fuerza para continuar en el camino del bien, en el servicio al prójimo, cumpliendo con las obras de misericordia. “En sus manos fraternales colocamos a nuestro país, a todos los dominicanos, para que ella nos alcance la gracia de vivir con intensidad nuestra vida de fe sin temor, como ella lo hizo”, indicó.
Recordó que 2016 fue declarado por el papa Francisco como “El año de la Misericordia”, por lo que recomendó a los dominicanos hacer énfasis en cultivar la paz, para estar en consonancia con esa declaratoria.
