Línea de ayuda: El departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud Pública de República Dominicana posee la línea de información sobre la depresión en el 809-544-4223.
Cualquier persona cercana puede estar pasando por un mal momento que lo lleve a pensar que su única salida es terminar con su vida. Puede ser un compañero de trabajo, un amigo o un familiar… Si alguien habla de sentirse desesperanzado, ya no disfruta de las actividades que antes le gustaba realizar, está irritado o decaído la mayor parte del tiempo, ¡haz caso a su llamado de auxilio!
Aprovechamos que hoy, 10 de septiembre, es el Día Mundial para la Prevención del Suicidio para compartir seis consejos de expertos de cómo abordar el tema del suicidio con una persona que está pensando (o ha pensado) en quitarse la vida.
nicia una conversación
El propósito de la conversación es dejar que la otra persona se desahogue sobre sus sentimientos. Busca un lugar tranquilo y privado, donde se sienta cómodo, y asegúrate de que dispongan de suficiente tiempo para platicar. Hablar de suicidio nunca es fácil, por lo que debes estar claro desde un principio. Lo más importante es no interrumpir al otro mientras habla, no juzgar ni ofrecerle soluciones basadas en tus propias ideas.
Dale seguimiento, pero no seas invasivo
Hazle saber que estás ahí para escuchar sus problemas y preocupaciones, que cuenta con tu apoyo para lo que necesite. Dale seguimiento a sus cambios de ánimo, las cosas que hace o deja hacer e incluso la manera en la que se expresa. Eso sí, sin llegar al extremo de agobiarlo o acosarlo.
Bríndale información de valor
En la actualidad hay mucha información sobre suicidio de especialistas en el área de la salud mental a la que se puede acceder de manera gratuita a través de internet. Acércale información que, en lugar de alarmarlo, lo ayude a entender por lo que está pasando y le proporcione métodos de ayuda.
Motívalo a realizar actividad física
El portal especializado MayoClinic refiere que hacer ejercicio durante 30 minutos o más al día, de tres a cinco días a la semana, puede mejorar significativamente los síntomas de depresión o ansiedad. Sin embargo, las pequeñas cantidades de actividad física también pueden marcar la diferencia. Es normal que una persona con pensamientos suicidas no tenga ganas de hacer ejercicio, pero debes animarlo a moverse, a su ritmo y como se sienta más cómodo.
Busca ayuda profesional y grupos de apoyo
Deshacerse de los pensamientos suicidas no solo requiere voluntad, también es necesario recurrir a la ayuda de un profesional en el área, como un psicólogo o psiquiatra. Los grupos de apoyo también contribuyen al proceso de recuperación. En ellos las personas que han tenido pensamientos o intentos de suicidios se reúnen para compartir sus experiencias, lo que ayuda a no sentirse solo en este proceso.
Sé consciente y hazle saber que la recuperación lleva tiempo
La recuperación no suele darse de un momento a otro: requiere tiempo. Al igual que como pasa con otros problemas de salud mental, hay picos y valles. Debes ser consciente de ello para tenerle la paciencia que amerita a la otra persona y a su vez motivarlo a seguir adelante, aunque esté viendo cambios de a poco.
