
María Alcántara, viuda de Piti Montero, aseguró que su esposo estaba de espalda, el imputado lo volteó y le propinó tres disparos, los dos primeros cuando tenía su hija de tres años en los brazos.
En la audiencia de este martes se presentó el arma que, de acuerdo con Alcántara, fue la que usó Medina Abud el día del asesinato.
“En ese momento yo le decía: por favor, no lo mate, por favor, no lo mate, y él le dio el último disparo y se fue”, explicó Alcántara cuando declaraba ante los jueces del Primer Tribunal Colegiado.
Los jueces Antonio Sánchez, Teófilo Andujar y Willie de Jesús Núñez Mejía reenviaron la audiencia para el próximo martes a las 9 de la mañana.
Sobornos y amenazas
Durante el interrogatorio, la testigo María Alcántara declaró que de forma indirecta ha recibido amenazas y sobornos por parte de personas allegadas a Frederick Medina Abud.
“Cuando me encuentro en la calle se me han acercado personas que me han ofrecido 10 mil pesos y hasta medio millón para que yo desista de la querella”, sostuvo.
Alcántara acusó a una persona que labora en una panadería propiedad del acusado, ubicada en los Ríos, quien, según dijo, le aseguró que, de no hacer caso a los llamados, podría correr con la misma suerte de su esposo.
“Mi esposo no vale esa cantidad de dinero, a él que haga lo que quiera, porque no fue un perro que él mató”, afirmó.
Toribio Pití Montero murió el 28 de marzo del 2008, a causa de tres disparos que, alegadamente, le propinó el ex mayor de la Policía Nacional Frederick Medina Abud, cuando el primero le exigía que no se conectara de la electricidad de su casa.
Recientemente, el Primer Tribunal Colegiado ordenó la libertad del ex mayor de la Policía Nacional.
Medina Abud fue uno de los primeros apresados por el caso Paya. Sin embargo, fue excluido luego del expediente.