
Incrédula ante los hechos, Josefina Perdomo, madre del menor asesinado, recuerda con tristeza la última vez que vio al pequeño.
Según versiones el niño agresor quiso cobrarle al adolescente una leche del desayuno escolar y este se negó a pagarle.
La mayoría de los residentes del lugar son de nacionalidad haitiana por lo que muestran su inconformidad ante los hechos.
Moradores y familiares el niño Marcos Rosario lo definen como tranquilo y que lo único que quería era estudiar para ser ingeniero, según lo expresa Chery del Rosario, hermana del menor.
El ambiente se mantiene tenso en el sector de Barsequillo, donde los dominicanos temen represalias por parte de los haitianos.
El hecho ocurrió en la escuela Juana Abreu de la referida comunidad. El menor expiró cuando era trasladado al hospital de la localidad.