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miércoles, 4 de julio de 2012

San Francisco de Macorís. – Violentas protestan se han escenificado en la extensión de San Francisco de Macorís de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Los estudiantes reclamaban por el aumento, catalogado por ellos como abusivo, de los créditos y otros servicios universitarios.

De acuerdo a una nota de prensa enviada por el Frente de Liberación Amín Abel (FELABEL), cinco estudiantes resultaron heridos durante las protestas, como resultado de "la descarga de cartuchazos, balas y bombas lacrimógenas de parte de los agentes policiales, quienes aparecieron en escena con rapidez y agresividad, cuando todavía la protesta no había desbordado los límites".

Entre los afectado se encuentran Daniel Jerez, vocero del Felabel, herido de bala en el pie izquierdo, con orificio de entrada y salida, cuando fue a socorrer a su compañero Edison Paulino, miembro del mismo grupo estudiantil, quien fue impactado con una bala que le atravesó la pierna derecha y le quebró el perdoné.

Los demás estudiantes lesionados fueron Joel Martínez y Elier Mercedes, ambos miembros del Comité Ejecutivo de la FED (UASD-SFM), quienes fueron heridos de perdigones el primero e impactado por un bombazo en su brazo derecho el segundo, además de Wandy Duarte, a quien se le alojaron los mismo en la parte inferior de su ojo izquierdo.

El FELABEL indica que "la incursión violenta de los agentes antimotines del Comando regional Nordeste de la Policía Nacional avivó la protesta, que se recrudeció tras caer heridos de bala Jerez y Edison Paulino".

Como repercusiones de la protestas señala que el tránsito vehicular por la carretera que comunica la ciudad de San Francisco de Macorís con el municipio de Nagua quedó interrumpido por varias horas en las inmediaciones del centro universitario, debido a la gran cantidad de neumáticos incendiados y que permanecía ocupada por los manifestantes.

Las protestas continuaron entrada la noche, con el encendido de neumáticos en las principales avenidas y en distintos barrios de San Francisco de Macorís, lo que provocó un recogimiento temprano de la población y que las actividades nocturnas se redujeran a su mínima expresión.