El hallazgo del cadáver de Wilbert Lindor, de seis años y padres haitianos, se produjo a en una cañada a escasos metros de su vivienda donde residía junto a su abuela y su padre.
El cuerpo del pequeño estaba sin cabeza, ni pies y presenta un enorme agujero en el pecho. Un adolescente de 14 años fue quien alertó a la familia, según publica este sábado el digital PROCESO.
Familiares dijeron que Lindor fue visto por última vez el primero de marzo en horas de la tarde y captado por las cámaras de vigilancia de un colmado, cuyos videos se encuentran en manos de la Policía.
Según cuentan, el infante había desapareció luego de haber llegado de la escuela.