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lunes, 21 de marzo de 2011

RECLAMARON A FENATRANO QUE ENTREGUE AL CONDUCTOR IDENTIFICADO COMO RUFINO



Deyanira Polanco
Santo Domingo

Moradores del barrio Canaán Segundo en Villa Mella bloquearon hoy el tránsito en la carretera que conduce a Yamasá en reclamo de que la Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción, FENATRANO, que dirige Juan Hubieres, entregue al chofer, identificado como “Rufino”, quien conducía el vehículo que se accidentó ayer causando la muerte de unos ocho menores y ocho heridos.

Vecinos y parientes de los accidentados lanzan basura a la vía y queman ramas secas en reclamo de que se haga justicia. Un niño mientras lanzaba basura gritaba: “Es mi hermano el que se está muriendo”.

La mayoría de las víctimas, con edades de entre 13 y 14 años, son velados en el empobrecido sector donde todos lamentan las muertes, ante la desesperación de madres que lloran y piden justicia. De hecho, es la palabra justicia la que retumba en medio de los gritos.

Al referirse a lo ocurrido, todos coinciden en que los niños habían pedido permiso para ir a un paseo. La señora dulce Nereyda Rincón, Abuela de Anderson López Rincón, de 13 años, dijo que su nieto le llevó un volante donde decía que el paseo era del colegio Carolina y que el precio eran 200 pesos. Una parte de los fallecidos estudiaban como becados en este centro docente.

Sin embargo, en ese centro educativo, que ahora se llama Colegio Jehová MISI, cristiano, el director Alonzo Marte de Paula, dijo que ellos no organizan ese tipo de actividades porque están prohibidas por el Ministerio de Educación y porque, a su entender, se promueven antivalores. Abogó para que el conductor del vehículo sea apresado ya que lo considera responsable de esa tragedia.

La versión de un niño sobreviviente dice que el chofer estaba borracho y que ellos le pedían que bajara la velocidad. Al extremo de que el cobrador le pidió que lo dejara conducir a él, pero en ese momento, el conductor habría comenzado a “jugar” con el volante y se produjo el accidente.

Entre los niños que están siendo velados hoy por sus familias se encuentran Michael Roque De Jesús, 14 años; Anderson, 13 años; Kensi Mosquea, que ayer cumplía trece años y su cadáver fue llevado para velarlo en los Guaricanos; José Manuel Báez de 14 años y Yensi María Rosario, 16 años.