La compañía Luz y Fuerda da "palo acechao" con alza de 7.50 pesos el kiloLAS TERRENAS (R. Dominicana).- Cuando los habitantes de Las Terrenas recibieron la factura de la energía eléctrica correspondiente al mes de agosto se encontraron con un sorpresivo aumento de 7.50 pesos por cada kilo consumido.
De acuerdo con César Mieses, dirigente comunitario, aunque Luz y Fuerza de Las Terrenas, nombre de la compañía que suple energía eléctrica a la comunidad turística, suele cometer abusos subiendo el precio de la energía cuando le da la gana, esta vez el golpe a despertado la ira en la mayoría de la población.
Mieses explica que Luz y Fuerza ha obstaculizado la entrada de EdeNorte para evitar competencia. “Así mantiene el monopolio y puede jugar con los precios”, refirió.
Las organizaciones comunitarias expusieron que la compañía envió un comunicado diciendo que se ha visto "obligada" a transferir el aumento a los usuarios porque el gobierno le está cobrando unos impuestos al combustible.
Entre los argumentos para cobrar hasta 22.50 pesos por kilo de energía, la compañía estableció en su comunicado que: “Los ministerios de Industria y Comercio y Hacienda se niegan a la exoneración de varios impuestos correspondientes, según la Ley General de Electricidad, así como algunos incentivos por pertenecer al sector turístico”.
Comerciantes de diversas nacionalidades se quejaron del “sorprendente aumento” en la facturación del mes de agosto, la cual llegó con una carta de la empresa explicando las razones del alza.
Según Mieses, supermercados, hoteles y carnicerías recibieron facturas entre 70 mil y 120 mil pesos.
Mieses explicó que las organizaciones comunitarias han comenzado un programa de encuentros y reuniones para dar una respuesta contundente a lo que considera “un abuso de esa empresa”.
“Este martes 6 se prevé la realización de una marcha pacífica, organizada por extranjeros con el propósito de motivar la abstención al pago y al consumo”, declaró Mieses, dijo que dueños de hoteles, restaurantes, bares, colegios, colmados, salones de belleza, peluquerías, transportistas, entre otros, amenazan con hacer sentir sus reclamos.
