
El caso más reciente se produjo la madrugada de este martes en la finca del ganadero Ángel Ortega, ubicada en la comunidad de Arroyo Vuelta Piedra Blanca, donde cinco vacas Holstein en plena producción de leche fueron descuartizadas, llevándose las mejores partes de los animales y las demás dejadas abandonadas.
La ganadería de Monseñor Nouel está siendo azotada a juicio de Ortega porque las autoridades no ayudan a los hombres de trabajo.
Se quejo del poco respaldo que reciben los productores de reses, los que recordó en los últimos años han perdido millones producto de las acciones delictivas.
En protesta por el hecho miembros de la Asociación de Ganaderos depositaron los restos de las vacas en las orillas de la autopista Duarte próximo a Piedra Blanca, lo que llamó ampliamente la atención de miles de conductores que viajaban en direcciones norte-sur, sur-norte.
Los ganaderos hacen un llamado al mayor general José Armando Polanco Gómez de la Policía Nacional en interés de que instruya a los agentes policiales diseminados en la provincia a fin de prestarles atención a los casos registrados.
Por Tony Balbuena