ANTONIO MARIA DELGADO
ADELGADO@ELNUEVOHERALD.COM
Acorralado por la pérdida del respaldo popular, el régimen bolivariano de Nicolás Maduro no encuentra más alternativa que entregarse a los brazos de la opresión para mantener su ilegítimo ejercicio del poder, deambulando de esa manera por el resbaladizo camino de las dictaduras, advirtió el dirigente de la oposición venezolana Antonio Ledezma.
El Alcalde del Distrito Metropolitano de Caracas, quien viajó esta semana a Miami para explicar la situación del país, advirtió que las instituciones democráticas y los derechos ciudadanos están cada vez más amenazados en el país petrolero, ahora que el chavismo atraviesa por una crisis de legitimidad y carece de capacidad de dar respuesta a las exigencias de la sociedad.
“Cuando este gobierno pierde la fuerza electoral, su fortaleza ya no está en los votos sino en la represión, y por eso es que están recrudeciendo los mecanismos de represión”, explicó Ledezma en una entrevista telefónica.
“El gobierno pretende, por la fuerza, silenciar la protesta cívica del pueblo que no solamente denunció fraude electoral sino que reclama urgentemente soluciones a los graves problemas del país, problemas como el desabastecimiento de alimentos, la devaluación de la moneda venezolana y la galopante corrupción”, agregó.
Ledezma formuló las declaraciones en momentos en que el gobierno bolivariano emprende una ola de represión para tratar de silenciar las denuncias formulados por el candidato presidencial de la oposición, Henrique Capriles, de que cometió fraude en las elecciones del 14 de abril.
Maduro, quien fue declarado ganador de los comicios con una ventaja inferior a los dos puntos porcentuales frente a Capriles, acusa a la oposición de emprender campañas de desestabilización del país y presentó cargos judiciales contra sus líderes. Al mismo tiempo, está emprendiendo jornadas de persecución contra periodistas de los medios de comunicación privados y está deteniendo a militares de los que sospecha no respaldan a la Revolución Bolivariana.
Capriles impugnó el jueves el resultado electoral ante el Tribunal Supremo de Justicia, alegando que más de 3,000 irregularidades fueron detectadas durante los comicios y que el Consejo Nacional Electoral, entidad controlada por el chavismo y cuya gestión ha sido reiteradamente cuestionada por líderes de la oposición.
El chavismo también ha tomado medidas para silenciar a los diputados de la oposición, despidiéndoles de sus posiciones dentro de comisiones, negándoles de hacer uso de su derecho de palabra y, en lo que causó estupor alrededor del mundo, golpeando salvajemente a algunos de ellos dentro de la sede del cuerpo legislativo.
Diputados de la oposición dijeron que habían sido emboscados por sus homólogos del oficialismo bajo la risa del presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello, en un ataque que dejó varios lesionados incluyendo la ex candidata presidencial María Corina Machado y el Coordinador Nacional de Primero Justicia, Julio Borges.
Para Ledezma, todo esto son señales claras de hacia dónde se dirige el chavismo.
“Está clarito que en Venezuela lo que se viene desarrollando es el guión de una neo dictadura, porque el corazón de una democracia es el Parlamento. El Parlamento es el santuario de la libertad de expresión, donde se puede desembocar los conflictos, para buscar una solución”, comentó el dirigente.