Fidel Santana, dirigente del Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO), aseguró ayer que la huelga que han convocado para el lunes organizaciones de diferentes sectores sociales será pacífica y a ninguna persona se le obligará ni coaccionará para que respalde la protesta contra el aumento de los impuestos.Santana, durante una entrevista en el programa de televisión El Bulevar con Pablo por CDN, dijo que esta huelga nacional será una manifestación de todos los sectores sociales contra la política de gastos desmedidos del gobierno y el incremento de los impuestos. “Se han hecho seis reformas impositivas en los últimos años y al final de cada período el déficit del gobierno es mayor”, dijo Santana. Estimó que la población está resentida y carece de condiciones para continuar pagando los impuestos cada vez más altos que se le requieren.
“No queremos – afirmó Santana – continuar entregando dinero en impuestos para que el gobierno lo gaste en lujos.”
Descartó que la protesta sea una manifestación de grupos de izquierda, como señaló el secretario de Interior, José Ramón Fadul, y aseguró que entre los organizadores de la protesta hay empresarios de muchos niveles e incluso grupos de campesinos y amas de casa.
La huelga será una forma de darle expresión pacíficamente a la inconformidad de la población con la política de gastos del gobierno, dijo Santana. Indicó que en cierta forma será un mecanismo para impedir que en el país se produzca una nueva avalancha de multitudes como la de abril de 1984 que surgió como un movimiento espontáneo y sin una figura que pudiera controlarlo. En esa oportunidad hubo cerca de 200 muertos cuando se usaron militares para reprimir las manifestaciones.
Santana advirtió que los políticos en la administración deben comprender que “el pueblo quiere explotar” y que la democracia prevé el uso de mecanismos para expresar la inconformidad y el gobierno está obligado a permitir esa forma de expresión.
Indicó que la huelga del lunes será la primera de una serie de manifestación que organizarán durante las próximas semanas para tratar de revertir el proceso de incremento de impuestos y el desmedido gasto público.
Entre los reclamos que se harán con estas protestas, indicó, estará el aumento del salario para los empleados públicos, especialmente para los policías y los militares, ya que todos están por debajo del mínimo.
Descartó que la posición del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) contra la huelga nacional pueda afectar los resultados.
Afirmó que entre los empresarios hay muchos de los más afectados por las acciones del gobierno y son los que están dando pleno apoyo a las manifestaciones aun cuando puedan ser reprimidos por las autoridades.
“No queremos – afirmó Santana – continuar entregando dinero en impuestos para que el gobierno lo gaste en lujos.”
Descartó que la protesta sea una manifestación de grupos de izquierda, como señaló el secretario de Interior, José Ramón Fadul, y aseguró que entre los organizadores de la protesta hay empresarios de muchos niveles e incluso grupos de campesinos y amas de casa.
La huelga será una forma de darle expresión pacíficamente a la inconformidad de la población con la política de gastos del gobierno, dijo Santana. Indicó que en cierta forma será un mecanismo para impedir que en el país se produzca una nueva avalancha de multitudes como la de abril de 1984 que surgió como un movimiento espontáneo y sin una figura que pudiera controlarlo. En esa oportunidad hubo cerca de 200 muertos cuando se usaron militares para reprimir las manifestaciones.
Santana advirtió que los políticos en la administración deben comprender que “el pueblo quiere explotar” y que la democracia prevé el uso de mecanismos para expresar la inconformidad y el gobierno está obligado a permitir esa forma de expresión.
Indicó que la huelga del lunes será la primera de una serie de manifestación que organizarán durante las próximas semanas para tratar de revertir el proceso de incremento de impuestos y el desmedido gasto público.
Entre los reclamos que se harán con estas protestas, indicó, estará el aumento del salario para los empleados públicos, especialmente para los policías y los militares, ya que todos están por debajo del mínimo.
Descartó que la posición del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) contra la huelga nacional pueda afectar los resultados.
Afirmó que entre los empresarios hay muchos de los más afectados por las acciones del gobierno y son los que están dando pleno apoyo a las manifestaciones aun cuando puedan ser reprimidos por las autoridades.
