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sábado, 19 de septiembre de 2009

Por Robert VargasSan Cristobal.- Lo que ocurrió este viernes en la sala de audiencias donde sería conocido el juicio preliminar a los 25 imputados de estar involucrados en la matanza de Paya, Baní, en agosto del pasado año marcó algunos precedentes.
Por ejemplo, los abogados se largaron de la sala de audiencias, los presos todos reclamaron justicia de viva voz y le dieron la espalda al tribunal; el juez expulsó de la sala a los periodistas, y continuó la audiciencia solo con los policias, los 13 fiscales y con los presos haciendo ruido porque lo consideran cómplice de una "trama" en su contra.
No fue una jornada cualquiera puesto que en la misma salió a reluciar un nombre nuevo: Juan Carlos López Bustillo, un colombiano, que Edward Mayobanex Rodríguez Montero, el marino de Los Mina, dice que no se explica cómo es que este hombre no está sentado en el banquillo de los acusados junto a ellos.
Rodriguez Miontero llamó directamente al Procurador Fiscal que lleva el liderazgo de la acusación, Francisco Polanco Ureña, para reclamarle porqué el tal López Bustillo "se esfumó" del expediente, aunque en principio era señalado como uno de los presuntos asesinos actuantes en Paya.El ex militar lleva su propia investigación del caso, según el mismo dijo de viva voz porque pretende demostrar que es inocente, y no el matarife que le atribuyen las autoridades.Y ahora ese tal López Bustillo parece ser su mayor preocupación para demostrar su inocencia.- "¿Usted no quiere descubrir la verdad? Le estoy dando datos", le dijo Rodriguez Montero al funcionario de la Procuraduría, con quien ya se ha comunicado dos veces para decirle "donde está la verdad".
Pero ese encontronazo fue apenas uno de los incidentes de la jornada. Luego se presentaron otros verdaderamente mayúsculos, como aquel en que la matricula completa de los abogados de la defensa de los 25 imputados decidió retitrarse de la sala de audiencias, dejando allí sentado al juez presidente del tribunal, a los fiscales y alborotados a los imputados.El incidente tuvo su origen en la negativa del juez de escuchar las alegaciones de un grupo de abogados que representan al imputado Noel Martín Sterlin, que reclamaban se les permitiera presentar un recurso de oposición a la admisión por el tribunal de 13 miembros del Ministerio Público que presentarían las acusaciones.Alegaban los abogados que a los acusados solo les permiten tres defensores, lo que los deja en desventaja frente a la acusación.Con esto, alegan los letrados, el tribunal viola el principio de igualdad procesal de las partes.El juez de la Corte de Apelación de la provincia San Cristóbal Leonardo Antonio Cruz no hizo caso cuando los abogados intentaban darle esa explicación y, al contrario, ordenó a los fiscales que presentaran su acusación.No pudieron hacerlo porque se quedaron solos conlos presos y el juez, No había, por tanto, abogados defensores.En medio de todo esto, los imputados justicia y que se le ponga fin "al montaje que tienen en contra nuestra después que armaron mal su muñeco".Los presos reclamaban justicia y denunciaban las "manipulaciones en su contra".Fue así cuando, de repente, el juez ordenó que el puñado d eperiodisa allí cubriendo las incidencias desalojaramo de inmediato el recinto.De nada sirvieron las alegaciones. ¡E¨pa fuera que van!Y nos sacaron a todos, sin que estuviera claro qué era lo que se pretendía.Después, cuando la marea bajó un poco, parece que el juez se dio cuenta que "metió la pata", al con los periodistas y mandó al alguacil a que casi le regora a los reporteros para que regresaran.

Esta es la persona de Aún así, un elemento de los servicios de inteligencia lanzó una amenaza contra este redactor. Su amenaza fue simple:-"Por la boca muere el peje".Parece que el tipo sabe lo que dice, a lo mejor ha matado muchos "peces". Es el tipo de la foto que estaba vestido de civil, dentro de los policías, grabando a todos, incluso a los periodistas lapicer que, en realidad, es una cámara de audio y video.Como el hombre amenazó con que, "por la boca muere el peje", les dejamos la foto ahí, por si acaso algo ocurre.Sigamos con el juicio.La cuestión es que en medio de los reclamos de justicia de los imputados, el juez presidente ordenó que la seguridad fuera reforzada antes de fallar tras escuchar los pedimentos de los fiscales.He aquí, sin embargo, que cuando los fiscales, el juez y la Secretaria del tribunal hablaban, todos los imputados se pusieron de pie y les dieron la espalda.Lo hicieron en presencia de un equipo de élite de la policía, los denominados Swat, que llegaron hasta con dos enormes policías.Al final, el magistrado ordenó que a los 25 acusados les fueran establecidos defensores públicos, lo que todos rechazaron por considerar que les son violados sus derechos.También reenvió la audiciencia para el próximo día 25 de septiembre, a la isma hora y en el mismo lugar.Todos los acusados parecen estar convencidos de que ese magistrado ha sido colocado en esa posición "para condenarnos sin obedecer al debido proceso". Todos se consideran inocentes y víctimas de una presunta conspiración en la que vinculan a funcionarios del ministerio público, a militares y policías "para proteger a los verdaderos asesinos y narcotraficantes".El próximo día 25, otra jornada será. Esperemos a ver lo que ocurre.