Breaking News
Loading...
domingo, 24 de mayo de 2009

Washington.- Estados Unidos ofreció a Cuba reanudar las conversaciones sobre asuntos migratorios, suspendidas en 2004, confirmó ayer una portavoz del Departamento de Estado.
"Tenemos la intención de renovar conversaciones con el fin de reafirmar el compromiso de ambas partes en favor de una migración legal y ordenada", señaló la portavoz a Efe.
Fuentes diplomáticas dijeron que la oferta de conversaciones, interrumpidas hace cinco años, fue presentada ante la Oficina de Intereses de Cuba en Washington.
La portavoz añadió que el objetivo de las conversaciones sería el de "revisar recientes tendencias en la migración ilegal cubana a Estados Unidos y mejorar la relación operacional con Cuba en temas de migración".
Funcionarios de inmigración de ambos países se reunieron por última vez en 2003 y los contactos fueron suspendidos por orden del entonces presidente George W. Bush un año después.
La posible reanudación de los contactos fue aplaudida por la Fundación Nacional Cubano Americana en Miami, Florida.
En un comunicado, la organización señaló que la iniciativa del Gobierno de Estados Unidos constituye "una oportunidad para resolver temas de interés nacional para Estados Unidos".
Robert Pastor, asesor para América Latina durante el Gobierno del presidente Jimmy Carter (1977-1981) indicó al diario The New York Times, que la oferta "es un muy importante paso hacia el comienzo de un nuevo diálogo entre EE.UU. y Cuba".
Sin embargo, cuatro legisladores de origen cubano que representan al estado de la Florida en el Congreso de Estados Unidos, criticaron la decisión del Gobierno.
"Poner en marcha estas conversaciones sin progreso por parte del régimen (cubano) no es consecuente con el declarado interés de la Administración de ver un movimiento por parte del Gobierno de Castro", señaló el senador demócrata Robert Menéndez.
"Estas conversaciones deberían estar condicionadas a que se aflojen las restricciones a los visados de salida (de Cuba) y se permita a diplomáticos estadounidenses visitar a migrantes repatriados para vigilar si se les castiga o no", indicó Menéndez.
"En estos momentos, la gente está languideciendo en las prisiones de Castro simplemente por 'salir ilegalmente'", manifestó.
Ileana Ros-Lehtinen y los hermanos Mario y Lincoln Díaz Balart, miembros de la Cámara de Representantes de EE.UU., también criticaron duramente la decisión.
Manifestaron que las conversaciones fueron suspendidas, porque el Gobierno de La Habana se negaba a otorgar visados a cubanos que habían recibido permiso para ingresar en Estados Unidos.
"La Administración de (el presidente Barack) Obama debería insistir primero en que la dictadura de Castro cumpla con el acuerdo, antes de reanudar las conversaciones", señalaron en una declaración.
"Lamentablemente esta constituye otra concesión unilateral del Gobierno de Obama a la dictadura", añadieron.