SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Bichara, dijo este lunes que los apagones que se están sintiendo en el país, se deben a que el Gobierno no cuenta con suficiente combustibles para poner a producir las plantas generadoras de electricidad, que ya están obsoletas.
Bichara explicó que el Gobierno no cuenta con los mecanismos necesarios para suministrar energías sin déficit, por lo que se está trabajando en la licitación de las plantas a carbón, aunque aclara que se podrían ver resultados de mejoría en cuatro años, cuando estas plantas estén funcionando.
Diferentes sectores del país han protestado por las tandas de apagones que reciben cada día. Recientemente residentes en el sector Capotillo de esta capital, realizaron manifestaciones por este hecho.
El problema de la energía eléctrica que ha sido un dolor de cabeza durante décadas, fue declarado por el Presidente Medina de “Alta y Estratégica Prioridad para el Desarrollo Económico Nacional”.
La solución, según el discurso del presidente está en mejorar las altas pérdidas de las empresas distribuidoras, la generación a bajo costo y la regulación e institucionalidad del sector.
En un trabajo que realizó la periodista Rosa Encarnación, el vicepresidente Ejecutivo de la CDEEE, Ruben Bichara, alegó que en septiembre iniciarán los trabajos para cambiar la matriz de generación.
Bichara revela que en el mercado internacional la instalación de cada megavatio ronda entre los dos y 2.5 millones de dólares.
Con estas dos plantas, estaríamos hablando de 1,200 a 1,500 millones de dólares, o su equivalente en pesos, entre 50 y 63 mil millones.
El gobierno asegura que además de tener una planta a carbón en sociedad con AES, existe un proyecto de conversión con EGEHAINA y discuten las posibilidades de cambiar COGENTRIX.
Sin embargo, estas modificaciones advierten, requieren tiempo.
Bichara insiste en que trabajan a corto plazo en busca de soluciones.
Medina además planteó que se mantendría el subsidio del Bonoluz, así como los medidores prepagos que se instalaron por primera vez en Punta Cana en 2009.
