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sábado, 10 de febrero de 2018

OT.COM

Katheryn Luna/Listín Diario
Santo Domingo.- La mañana del domingo, la pequeña Ángela de seis años dormía cuando su padrastro entró a la habitación y le quitó la vida, pero antes ya había asesinado también a su madre.
Víctor Alexander Portorreal Mendoza propinó una estocada en el cuello, la primera de varias, a su pareja Reyna Isabel Encarnación Morales, la amarró con una bufanda y cerró la habitación.
Así comenzó el hombre de 32 años a arrebatar las vidas de su pareja y sus tres hijastros, hechos que cometió según sus afirmaciones “por problemas económicos”.
Luego de cerrar la habitación donde había dejado desangrar a su pareja, pidió a Daniela, de 12 años, que fuera al colmado a comprar cigarrillos, aprovechando para ahocar a la más pequeña utilizando una corbata.
Al llegar la niña del colmado, también la ahorcó con la corbata y continuó su acto, violando a ambas hermanas.
Encarnación Morales y sus dos hijas eran asesinadas mientras que Rahamín, de nueve años, su otro hijo, jugaba en el primer piso del edificio donde se habían mudado hace unos 15 días en el kilómetro ocho de la carretera Sánchez.
Portorreal Mendoza buscó al niño y salió con él durante todo el día, regresando a dormir en la noche y proceder a quitarle la vida al día siguiente.
La cronología de los hechos fue ofrecida por el director de la Policía Nacional, mayor general Ney Aldrin Bautista, quien explicó que Portorreal Mendoza, fue apresado la mañana de ayer en el sector 30 de Mayo.
Los cadáveres de la madre y sus tres hijos fueron encontrados la mañana de el jueves, por el hedor de los cuerpos en estado de descomposición.
De acuerdo con el director de la Policía, la joven no estaba embarazada e informó que fueron apresadas otras cuatro personas, pero que hasta el momento no se ha establecido su vinculación con el hecho.
Brígida Morales, madre de Reyna Isabel, contó que Portorreal Mendoza nunca se mostró violento en los dos años de relación que tuvo con su hija.
Dijo que el miércoles, un día antes de ser hallados los cuerpos, habló por teléfono con él y éste le dijo que todo estaba bien.