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viernes, 16 de febrero de 2018


PUBLICADO POR PRENSALIBRENAGUA.BLOGSPOT.COM
Para Julio Cesar este es el acordeonista referente imprescindible dentro del subgénero musical dominicano conocido como merengue típico
Por Francis Frías
Nagua, Republica Dominicana, 15 febrero 2018.- Ante una propuesta del ciudadano Julio Cesar de La Cruz con el apoyo de Rafael Chaljub, la Asociación de Cronistas de Arte (ACROARTE), rendirá un homenaje póstumo al legado musical del más grande músico típico que ha parido la Republica Dominicana Tatico Henríquez.
La figura de Tatico en este homenaje póstumo para la celebración de la premiación 2018, en lo que se refiere a los honores apartados para esa noche, se suman personalidades de la cultura y el periodismo como la cantante Ileana Reynoso, una de las voces más potentes de la música popular y, de manera póstuma, Acroarte tributará el legado musical de Tatico Henríquez.
Julio Cesar De La Cruz joven inquieto y que vela por los mejores intereses de su comunidad, es nativo de la misma tierra que Domingo García Henríquez (Tatico),
Para Julio Cesar este es el acordeonista referente imprescindible dentro del subgénero musical dominicano conocido como merengue típico y fue una persona virtuosa del acordeón, fue un innovador de la música dominicana, al incorporar nuevos instrumentos al conjunto típico.

Declara que la casa materna debe ser rescatada y hacer de ella un museo porque Tatico, porque Tatico creció entre las carencias y limitaciones propias de los hogares pobres. Sus padres fueron Altagracia García y el acordeonista Juan Henríquez alias Bolo, quien lo introdujo en el conocimiento del instrumento.
´´He conversado con muchas personas sobre la vida de Tatico y todos coinciden que era un genio del acordeón y  hoy en día todos los músicos y aspirantes a tocar el acordeón la primera referencia es la de Tatico´´.Dijo Julio Cesar.
Indicó que la provincia, Nagua y el país agradecen eternamente a la Asociación de Cronistas de Arte por tomar en cuenta el legado de esta gran inspiración que se llamó Tatico Henríquez.
Tatico comenzó a darse a conocer sobre todo en las festividades religiosas y procesiones de su comarca, fiestas en las que la música folclórica constituía un vivo referente.
Según el periodista Huchi Lora y el escritor Rafael Chaljub Mejia, tras el ajusticiamiento de Trujillo en 1961, el merengue cayó en una crisis que amenazó con la desaparición del género. No obstante, músicos como Tatico, lo rescataron en su versión urbana. Este joven músico, recogió el merengue folclórico y desde su misma rítmica lo hizo evolucionar hacia una nueva versión.