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viernes, 20 de noviembre de 2009

Mejía afirma existe la convicción de defender el precio de las materias primas, que jugarán un "papel trascendental" en el futuro próximo.
VALLADOLI, España.- El ex presidente de la República Dominicana Hipólito Mejía ha puesto como ejemplo el modelo impulsado en Brasil por Luiz Inácio Lula da Silva para el desarrollo de Iberoamérica, porque "conjuga el crecimiento social con el beneficio económico sin demagogia".
Mejía, en una entrevista concedida a EFE en la ciudad de Valladolid, donde promueve ante la colonia dominicana su candidatura para las presidenciales de 2012, resaltó que la política sobre las materias primas desarrollada en Brasil desde 2003 por el presidente Lula es el espejo en el que mirarse.
En este sentido, mostró su convicción de que la lucha de los países productores por fijar ellos mismos en el mercado el precio de las materias primas mejorará la situación de Iberoamérica y le permitirá tener un rol más importante en el mundo.
Mejía, de 68 años, que fue presidente de la República Dominicana de 2000 a 2004, indicó que aunque los países latinoamericanos están aprendiendo a actuar como bloque, existe la convicción de defender el precio de las materias primas, que jugarán un "papel trascendental" en el futuro próximo.
"Si yo produzco cacao, Bélgica no puede trazar las pautas de lo que yo tengo que hacer con él, y si yo produzco banano orgánico, la materia prima es mía, el clima es mío y yo mismo puedo entrar al mercado internacional", explicó este ingeniero agrónomo formado en los Estados Unidos.
La creciente importancia global de Iberoamérica puede truncarse, según el ex presidente dominicano, por la propensión a la radicalización de izquierdas y derechas de los políticos, como en el caso de la República Dominicana, con idearios influidos por el populismo de países del entorno y métodos como el que denomina como "referenditis".
"En las constituciones se consagra la posibilidad de hacer un referéndum, haces uno, otro y mientras tú no ganas, puedes seguir haciéndolos. Eso es problemático", opinó.
Mejía se congratuló de que las relaciones entre la República Dominicana y España no hayan estado nunca mejor que en los últimos diez años, pues España ha sido capaz de "redescubrir" América, tal y como, según él, pretendía el ex presidente español Felipe González hace veinte años.
Sobre la situación en Cuba, indicó que, aunque no cuenta con un papel importante en las relaciones entre los países caribeños, hay cosas que se deberían de cambiar allí, como el "error" que supone el mantenimiento de presos políticos o el bloqueo económico.
El ex mandatario precisó que las pautas marcadas por el Gobierno de La Habana son "bastante similares" con Raúl Castro a lo que lo eran con su hermano Fidel, pues entre ellos existe una "afinidad y una lealtad muy especial".
Para Mejía la experiencia china sería positiva para Cuba: "tú puedes pensar como tú quieras y actuar dentro del contexto del mundo de la libre empresa, de las actividades y la inversión como debe ser".
Recordó que en la próxima Cumbre Iberoamericana, que se celebrará en Estoril (Portugal) el 29 de noviembre y 1 de diciembre, un grupo de ex presidentes de la República Dominicana, entre los que figura él mismo, presentará un programa de políticas sociales y económicas para el desarrollo de su país.
El proyecto incluirá "prioridades" y "necesidades" como la apertura de "puertas y ventanas" a la educación hasta fijar la inversión en ella del cuatro por ciento del PIB y la salida a los mercados internacionales en el campo de la agroindustria, los bienes medioambientales y los recursos naturales.
Asimismo, apostará por una política social que mejore las condiciones en el campo de la salud y fomente la construcción de viviendas. "El mundo dominicano y latinoamericano necesita viviendas humanas, que la gente pueda vivir como seres humanos y no como cerdos", aseveró.
Mejía consideró clave la lucha contra la corrupción, pues un país no puede patrocinar que "diez, veinte o treinta" personas roben un país.
Preguntado por su deseo de retornar a la presidencia en 2012, adujo que tiene "suficiente experiencia y la firme decisión para enfrentarse a los problemas nacionales".
Para que pueda presentarse como líder de la fuerza política a la que pertenece, el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Mejía espera que se resuelvan las dificultades, divisiones internas "e intentos de apartar la democracia en la elección de candidatos" amparadas por el actual líder, Miguel Vargas Maldonado.