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sábado, 28 de noviembre de 2009

Hace dos años, las mellizas Carla Merhige y Lisa Knight trabajaron como voluntarias en una prisión juvenil de Miami, donde cantaron a dúo ante docenas de muchachas con problemas durante las Navidades.
Lisa, con su acento country, y Carla con una voz más emotiva, entonaron canciones ante docenas de muchachas que estaban esperando juicio.
El jueves, las voces de las dos jóvenes de 33 años callaron para siempre.
Según la policía, su hermano, Paul Michael Merhige, las mató a tiros junto a otros dos parientes --una niña de 6 años, Makayla Sitton, y una mujer de 76-- en la reunión familiar del Día de Acción de Gracias en Palm Beach. Otras dos personas, incluyendo al esposo de Lisa, Patrick Knight, de 37 años, fueron heridas. Las autoridades informaron que Lisa Knight estaba embarazada. El motivo del crimen no está claro.
La policía estaba buscando a Paul Michael Merhige, de 35 años, por todo el sur de la Florida. Merhige, que vivía en Kendall, huyó en un Toyota Camry azul del 2007.
Se sabe poco de él, aunque algunos amigos dijeron que Lisa Knight hablaba con frecuencia de su hermano y de los maravillosos momentos que pasaron cuando niños. Se había graduado de la Preparatoria Gulliver y de la Universidad de Miami.
El viernes, amigos de ambas jóvenes --que nacieron y se criaron en Miami-- lloraban el violento final de sus vidas, llenando las paredes del Facebook de las hermanas con notas de condolencia.
Las mellizas era "inseparables'', hablaban por teléfono varias veces al día, pasaban las fiestas juntas y salían en vacaciones familiares, comentó Sonia Ferrer, la directora del Programa Guardian-ad-Litem de Miami-Dade, donde Carla trabajaba.
"Ellas se completaban'', añadió Ferrer. "Carla estaba muy orgullosa de los logros de su hermana y su hermana estaba muy orgullosa de Carla''.
La jueza de Circuito de Miami-Dade Cindy Lederman, que ayudó a organizar los conciertos de Navidades, afirmó. "[Cantar] era un don que tenían, y lo compartían con todo el mundo, especialmente con los niños. Nunca las vi sin que estuvieran sonriendo'.
"Eran los seres humanos más encantadores que uno pudiera conocer'', subrayó Lederman. "Esto es algo extremadamente triste''.
Las hermanas tenían voces "angelicales'' y frecuentemente cantaban en las fiestas del juzgado. También cantaban en su iglesia, Our Lady of Lebanon, en Coral Way, y en bodas, funerales y otras ocasiones, según sus amigos.
Las hermanas fueron a la Epiphany Catholic School --donde cantaron a dúo en programas de talentos de la escuela primaria-- y luego en la Academia de Our Lady of Lourdes.
Lisa se graduó de la Universidad de Miami, donde luego estudió una maestría (MBA); Carla era egresada de la Universidad Internacional de la Florida.
Lisa Knight dejó su trabajo en el juzgado del Condado de Miami-Dade hace unos años para trabajar con su madre en Coldwell Banker en Pinecrest. Es recordada como una devota amiga, de una excepcional madurez y quien siempre tenía tiempo para los demás.
"Si usted quería consejo siempre estaba dispuesta a escuchar', afirmó Miguel Arellano, un agente inmobiliario en Coldwell Banker. "Siempre tenía excelentes consejos. Era muy cariñosa''.
Su esposo, Patrick Knight, es un abogado litigante y conferencista motivacional.
Los colegas de Carla Merhige, una activista de los niños que pasó nueve años en la oficina de los custodios estatales, y que recientemente empezó una nueva tarea trabajando con adolescentes que estuvieran saliendo del sistema de cuidado estatal, la describió como una persona dedicada a los niños y las familias, y una maravillosa compañera.