
El informe elaborado por la Comisión de la Procuraduría General de la República, que investigó la muerte de Cecilio Díaz y William de Jesús Batista Checo, presuntos secuestradores del joven Eduardo Antonio Baldera Gómez, afirma que la Policía Nacional mintió y ocultó información al Ministerio Público.
“Hasta el día de hoy (27 de noviembre), los funcionarios de la PN no le han informado esos acontecimientos a la Procuraduría Fiscal del Distrito Judicial de Montecristi, ni siquiera por cortesía”, sostiene el informe.
La foto demuestra que Batista Checo fue apresado vivo.
Archivo/Clave DigitalIndica que los policías también mintieron, al afirmar que les ocuparon a los presuntos secuestradores, muertos el 9 de octubre, dos pistolas una Browning, 9 mm, No. 245PN66646, y la otra de marca y numeración no visibles.
Explica que esas armas no fueron entregadas al Ministerio Público ni a la comisión de investigación, se convirtieron en “evidencia contaminada y se descarta que fueran ocupadas a Díaz y Batista Checo.
Resalta, asimismo, que si los sospechosos del secuestro fueron debidamente entregados a la Policía por varios habitantes de la zona de Montecristi, no existe posibilidad de que ellos portaran esas dos pistolas y las usaran contra los agentes policiales en el supuesto intercambio de disparos.
“Eso constituye una inventiva de parte de los miembros de la patrulla policial para poder quedar exonerados de responsabilidad”, sostiene el informe.
EL SECUESTRO
Inesperado desenlace
Eduardo Antonio Baldera Gómez, de Nagua, fue secuestrado en esa ciudad el 18 de septiembre, y logró un milagroso escape el 10 de octubre, en una zona rural de Villa Vásquez, en la nodestana provincia de Montecristi.
Según la versión narrada por el joven estudiante a las 6:00 de la mañana del viernes 9 de octubre, uno de los secuestradores se confió al creerlo dormido y fue a asearse, ocasión que él aprovechó para liberarse de las cadenas que tenía en los pies, y de las esposas, y huir a campo traviesa. “Ellos, en la noche me dejaban las esposas flojas y las cadenas que tenía en los pies, las que logré soltar y pude escaparme”, dijo. Posteriormente explicó que abrió las esposas con “un palito”.Violaciones. Explica que la Policía Nacional violó el artículo 277 del Código Procesal Penal, al no informar de inmediato y ocultar al Ministerio Público las circunstancias en que ocurrió el supuesto intercambio de disparos con Batista Checo y Díaz.
También se acusa a la PN de violar el artículo 174 del mismo CPP, que ordena que los cadáveres sean debidamente levantados por un médico legista y representantes del Ministerio Público.
Otro artículo del CPP violado por la PN, según los investigadores de la comisión, es el 189, al no entregar al Ministerio Público las armas de fuego y otras evidencias que presumiblemente comprometían a los sospechosos del rapto de Baldera Gómez.
Extraño. Uno de los elementos que más llama la atención en la acción en la que fueron muertos Díaz y Batista Checo es que los oficiales y agentes policiales procedían de puntos diversos y distantes de la geografía nacional, y se desconoce las razones por las cuales fueron reunidos para esta acción en la fronteriza provincia de Montecristi, después del extraordinario “escape” logrado por Baldera Gómez el 10 de octubre, y cuando ya habían sido apresados los dos sospechosos del rapto sin que opusieran ninguna resistencia.
NOTAS VINCULADAS
Descargue documentoNo se explica por qué oficiales del centro y los extremos del país tuvieron que dejar sus responsabilidades en las provincias en que están asignados, para enfrentar a dos hombres que ya estaban bajo arresto.
Como informó el viernes 27 de noviembre el Ministerio Público la comisión investigadora recomendó que el teniente coronel Alberto Trejo Pérez, con funciones en Montecristi; el mayor Jesús Rafael Tejada Tejada, subdirector de Inteligencia Delictiva, en la provincia Altagracia; el mayor Franklin E. Santana Martínez, subdirector de Investigaciones Criminales, en Valverde; el segundo teniente José Luis Peralta Valentín, subdirector de Inteligencia en Monseñor Nouel, y el segundo teniente Catalino de Jesús Pérez, de Mao, sean sometidos a la justicia por haber ejecutado a los dos hombres bajo arresto.
CIFRAS
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son los agentes implicados en la muerte de los presuntos secuestradores de Eduardo Baldera Gómez. En principio se alegó que hubo un “intercambio de disparos”.
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integrantes de la comisión firmaron el informe: Ramón A. Madera Arias, procurador adjunto; Clara J. Zapata, fiscal de Montecristi, y Vinicio Hernández, general de la PN.Los investigadores recomendaron además que sean sometidos el alférez de fragata de la Marina de Guerra, Ramirito Dumé Nina, por cómplice en la ejecución, al ser quien recibió vivo a Cecilio Díaz por parte de los moradores de la sección Los Conucos de Villa Vásquez, Montecristi.
Para el sargento mayor (MDG), Víctor Manuel Féliz Féliz; el sargento (MDG) Edgar López López; y para el también marino Javier José Heredia, se recomienda que sean sancionados y trasladados por mentir.
La comisión concluye que no es cierta la versión del intercambio de disparos en el mismo lugar, ya que las pruebas de sangre y otras evidencias demuestran que fueron ejecutados por separado en sitios distintos.
¿Y el coronel?. Es un misterio el paradero del teniente coronel identificado como “Lebrón” o “García Lebrón”, supuestamente de Bonao, quien entregó RD$5 mil al alcalde de Sabana Cruz, Lino González, como agradecimiento por la captura de Díaz. Los agentes investigados niegan haberlo visto o que les conste su existencia ni su presencia.
El pasado lunes, el Juzgado de Atención Permanente de Montecristi ordenó tres meses de prisión preventiva contra los cinco policías. Y para el marino Ramirito Dumé ordenó el pago de una garantía económica de RD$200 mil, el reporte periódico los 15 y 30 de cada mes, más el impedimento de salida del país.